Obras de la Colección Bueler-Bernard

Gradual 13 Trasladare a Cariathiarin . Los parpados Cerrados., 1991
óleo, sobre tela, 210x175cm

Esta pintura forma parte de un conjunto de quince obras tituladas Graduales, las cuales hacen referencia a espacios sagrados. El subtítulo de la pintura, tiene que ver con el Antiguo Testamento. Cariathiarin (hoy Quirat Jearim),  era la ciudad donde se llevó el Arca Sagrada*, una vez la rabia se hubo apoderado en la ciudad de Bet Semes (lugar de origen del Arca).

Hablando de forma metafórica, Gradual 13 se puede considerar como la representación de la rabia en su estado inicial de calma. Este proceso puede verse simbolizado como una ráfaga de luz clara y brillante que prevé la llegada de la lluvia. Como una plácida corriente dibujada de manera vertical en la pintura, el artista representa el agua que busca su camino a través los restos del fuego que ya están candentes y que aún pueden llevar a la provocación.

* El Arca Sagrada: En la Biblia se describe como un recipiente sagrado, donde se guardan la láminas de piedra donde estaban escritos los Diez Mandamientos.

sin título, 1998
óleo, sobre tela, 110x95cm

Esta pintura contiene formas figurativas. La primera, poco definida, tiene forma de caracol y la segunda de aguja. Por un lado, los dos objetos están situados en el centro de la pintura, sobre una superficie dorada. Por el otro, formas de otras dimensiones se desvanecen en un fondo de color azul oscuro.

El trasfondo surrealista nos traslada al campo de los sueños y del inconciente. Carl Jung, un pensador con gran autoridad, concibió que el caracol representa el yo en los sueños. En psicología, las partes blandas del caracol representa el inconsciente y la concha del caracol simboliza el consciente. Des del momento en que se dio un significado al caracol, la pintura tendría que hacer que el observador viera el inconsciente. Una vez el caracol se ha desvanecido completamente, podría adentrarse en el agujero de la aguja. Un fragmento de la Biblia se adecua a la obra. Dice:

“Otra vez te digo, que es más fácil que un camello pase por el agujero de una aguja que entrar un rico entre en el reino de Dios” Mateo 19:24
(nota la superficie dorada en la pintura)

sin título, 1997
óleo, sobre tela, 200x154cm

La parte superior de la pintura refleja los indescriptibles sufrimientos que la humanidad periódicamente tenía que soportar durante las persecuciones y los holocaustos. La parte inferior de la pintura está sumergida en la luz amable del perdón, y elimina todos los recuerdos de sufrimiento, miedo e injusticia.

La plegaria final de un judío preso en un campo de exterminio alemán expresa el mensaje de la pintura de una manera profundamente conmovedora.

Oh Señor,
Una vez llegue a la gloria,
no contemple únicamente los hombres de buena fe,
tenga en cuenta también aquellos de mala fe,
Pero no considere sus atrocidades.
a parte de estos crímenes,
contemple el fruto que dan:
a algunos de nosotros nos enseñaron la paciencia,
a otros el coraje.
Contemple la camaradería, la humanidad, la grandeza del corazón y
de la fidelidad.
Hemos conseguido su agradecimiento.
Oh, Señor,
Danos la gracia que el fruto que no habríamos merecido durante
nuestro calvario será algún día su redención.

Comunidad de Manos Plegadas núm. 2, 1992
cobre, óleo, sobre tela, 200x200cm

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El Soldador, 1989
tiza, carbón, pastel, sobre papel, 200x150cm

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Groc Incandescent II, 1992
óleo, sobre tela, 170x201cm

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sin título, 1988/90
óleo, sobre tela, 160x113cm

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La Corona d'un Re Donatore III, 1989
óleo, sobre tela, 196x283cm

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sin título
técnica mixta, tinta china, sobre papel, 52x79cm

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